martes, 13 de mayo de 2008

Dimensión cultural y crítica de la escuela

Centrarse en la dimensión cultural y crítica de la escuela supone poner el énfasis en los significados y sus procesos sociales y políticos en que se construyen. Cultura que se estructura fundamentalmente como modos de vida y sistemas de pensamiento, las dos dimensiones que aportan significado a las acciones que tienen lugar. Se pude definir cultura como el conjunto de significados, expectativas y comportamientos compartidos por un determinado grupo social, que facilitan y ordenan, limitan y potencian, los intercambios sociales, las producciones simbólicas y materiales y las realizaciones individuales y colectivas dentro de un marco espacial y temporal determinado.

Así, observada la escuela desde esta perspectiva, se considera que goza de todas las características propias de un grupo social en cuanto a los procesos de formación del mismo, comunicación, creación de normas, rituales, valores comunes, formas de pensamiento, conflicto de intereses, etc. Este modo de organización del colectivo humano que la compone es identificado como la cultura propia del mismo. Esto es, afirmamos que el grupo social que se constituye en el centro escolar configura su propia cultura, genuina e identificable para ese grupo

Como lo plantea Sarasola , la cultura se refiere al inconsciente de la organización. La cultura es una abstracción inconsciente y colectiva, aporta ideas y se conforma de una especie de arquetipos, redes de ideas. El inconsciente individual se nutre de la historia personal, mientras que lo que está en el inconsciente colectivo es producto de acuerdos no conscientes a los cuales se llega mediante el grupo, pero que terminan estableciendo una "estructura básica de personalidad cultural", una camisa que se pone por encima de la propia personalidad y filtra las proyecciones de ésta. La cultura viene a ser, en este sentido, un marco regulatorio (clasificatorio, organizador)

Podemos asumir, por lo tanto, que en el estado de vigila se registran gran cantidad de datos que son almacenados y clasificados en la memoria; otros datos, aparentemente menos importantes o quizá traumáticos, son igualmente registrados, pero de manera inconsciente, formulándose una amplia base de datos gestionada de modo muy singular. La estructura cultural encuentra asidero en dicha base de datos gracias al lenguaje, es levantada a partir de los elementos allí alojados y, a partir de ella, el individuo queda "sujetado", como metido dentro de un gran armazón, un disfraz, mediante el cual interactúa con los demás.

Es de vital importancia considerar los estados de la cultura para el buen funcionamiento de la organización, pero no como modelos puros que tienden a estigmatizar el estudio de ella. Sarasola plantea que: “”el conocimiento de la cultura de los centros educativos entendida como un patrón de supuestos básicos que se manifiestan, desarrollan, mantienen y transforman a través de creencias, valores y normas compartidas entre sus miembros, es fundamental”. Desde ese punto de vista el estudio de la cultura no puede dejar de ser considerada en la investigación educativa, pero sin caer en una sola mirada , en un solo modelo de estudio.

Lo importante es poder ver lo que efectivamente está subyacente en la organización escolar, el inconsciente colectivo. Lo inconsciente colectivo es un concepto básico de la teoría desarrollada por el psiquiatra suizo Carl Gustav Jung. La teoría de Jung establece que existe un lenguaje común a los seres humanos de todos los tiempos y lugares del mundo, constituido por símbolos primitivos con los que se expresa un contenido de la psiquis que está más allá de la razón.

La vida se me ha aparecido siempre como una planta que vive de su rizoma. Su vida propia no es perceptible, se esconde en el rizoma. Lo que es visible sobre la tierra dura sólo un verano. Luego se marchita. Es un fenómeno efímero. Si se medita el infinito devenir y perecer de la vida y de las culturas se recibe la impresión de la nada absoluta; pero yo no he perdido nunca el sentimiento de algo que vive y permanece bajo el eterno cambio. Lo que se ve es la flor, y ésta perece. El rizoma permanece.” C. G. Jung. Recuerdos sueños, pensamientos.

Lo que se espera es que el rizoma se evidencie de manera conciente, en la trama de la organización escolar. Que los integrantes del colectivo organizacional en el marco de una organización que aprende, logren la conciencia organizacional y que se ejerza la autonomía y la responsabilidad propia de estas organizaciones. Que permanezcan atentos a las señales del contexto, propiciando el aprendizaje de todos los integrantes. Que las señales de identidad propias de la escuela sean consignadas por el propio capital cultural, en que el trabajo colaborativo sea el factor determinante en la toma de conciencia de la organización.